martes, 22 de febrero de 2011

Justo, justo, al promediar la tarde...

Al promediar la tarde de aquél día
cuando iba mi habitual adios a darte,
fue una vaga congoja de dejarte
la que me hizo saber que te quería. (Follar).

Y ahí se inició la relación con Platón. Y con el segundo hijo de Judá.
(No es seguro que la poesía sea de Follar).

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