domingo, 23 de agosto de 2009

Veo brotes morenos.

Estamos llegando a un nivel tal de desconcierto que es difícil saber de dónde viene el aire. Y lo curioso es que el personal está más o menos contento.
No obstante creo que el chiringuito no es que no sea sostenible que no lo es, es que sencillamente no es viable. No es que sea malo, bueno o regular, es que no puede aguantar.
Algunas pistas.
¿Se percibe el mundo en su conjunto equilibrado? Yo diría que no.
¿Estamos saliendo de la crisis? No me lo creo.
¿Cuánto más consumamos es mejor? Ni me parece lo suyo, ni lo pretendo.
¿Vamos siendo más eficaces, más eficientes? No lo veo yo así.
¿Está mejorando la educación? Lo dudo mucho.
¿Qué cojones pasa con la gripe porcina? No lo sabemos.
¿Y la aviar, se pasó de moda? Eso parece.
¿Estamos cada vez mejor informados? No soy de esta opinión.
¿Dirigimos cada día más nuestro futuro como ciudadanos? No da la sensación.
¿Es cada vez más agradable el espacio donde vivimos? No para mi gusto.

Pero ¡Qué cojones! ¿Estamos más morenos?
Sí, las churris por lo menos, van volviendo más morenas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario