¿Se puede, se debe, solucionar el paro?

Imaginemos que lo elimináramos de forma radical, con dos cojones, gaseando a los parados según las listas del Inem. Por experimentar...a ver que pasaba...
En primer lugar descendería el pib de los cojones un 10 por ciento al dejarse de hacer esos currelos que hacen los pringaos en la parte cutre de la economía sumergida (que la otra parte, es otra parte). Jodido sería entonces convencer a alguien para cubrir estos, antes no puestos y ahora puestos y por tanto más caros, pero en todo caso, pringosos.
Por otra parte, la nueva clase inferior, sin desgraciados por debajo a los que explotar y sintiéndose ahora más necesaria, a lo mejor se planteaba mejoras. Y bajaría la productividad, aspecto económico que como todo el mundo culto e informado sabe, no conviene.
Y lo más importante de todo, nos quedaríamos sin putas y chachas a pelo chacha-puta. Y esta cuestión sí que claramente no puede ser. ¿Qué pasa, que la clase media no va a poder tener chacha, ni follar?
Dejemos pues las cosas como están y apoyemos a los que saben y en especial a la Ministra de Igualdad (que aunque sea de igualdad tiene tratamiento, sueldo y prebendas de Excelentísima Señora). Esforzándose sin medida está la chica intentando que todas las mujeres algún día, vivan igual, que ella. Yo creo que para el 2.570, lo consigue.
Y otra cosa es que de vez en cuando se monte un rollito como el de la vivienda para pescar incautos y durante algún tiempo haya más trabajo y después más esclavitud. Que la gente es tonta, pero no tanto.
Por cierto...
“No es la política la que crea extraños compañeros de cama, sino el matrimonio”